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Esta vivienda rinde homenaje al estilo Palm Springs de Richard Neutra. Dentro se ha creado unos espacios amplios, abiertos y con una cálida y sugerente mezcla de hormigón y madera.
Los cimientos ya se habían echado cuando Marc Walters y Rick Cassar se dieron cuenta exactamente de lo grande que sería su nueva casa en Palm Springs . "Nunca hablamos de los metros cuadrados. Simplemente dijimos: Esos bocetos son geniales. Sí, se ve genial, ¡vamos a por ello!" dice Walters, un instructor jubilado de un colegio comunitario. “Durante la construcción, uno de mis mayores temores era que no fuera atractivo”. Afortunadamente, tanto su diseñador como su arquitecto tenían una estrategia para conciliar sus prioridades: una casa de tres habitaciones que fuera lo suficientemente grande para entretener a todos sus amigos y familiares, pero que también fuera excepcionalmente cálida y acogedora. "Acogedor era el término que seguía apareciendo", dice el diseñador Sam Cardella , que reside en Palm Springs desde 1996. “Ese era el requisito previo para todo”.
Una casa acogedora de algo más de 650 metros cuadrados puede parecer un oxímoron, pero la arquitectura de Palm Springs ha sido durante mucho tiempo un abanderado de este estilo tan particular. A partir de la década de 1930, arquitectos como Richard Neutra , Donald Wexler y Albert Frey llegaron al desierto y construyeron un tipo de viviendas pensadas para relajarse en el paisaje rocoso. Con su forma baja, voladizos profundos y énfasis en el espacio exterior, esta casa es un claro descendiente del estilo modernista americano del desierto. Pero también se inclina hacia los colores oscuros y los acabados resistentes para ayudar a “dar un alma a la casa”, como dice Walters.
Así, estas paredes de cemento atablonado y los techos de abeto Douglas carbonizado parecen la combinación perfecta para la pareja, que se conoció en Portland, en el corazón del noroeste del Pacífico. En 2014, se casaron y se mudaron a la casa de vacaciones de Walters en Palm Springs, que había remodelado previamente con la ayuda de Cardella. A la pareja le encantaba la casa del Movivimiento Moderno de mediados de siglo de 1966 en el antiguo vecindario de Deepwell, pero querían una segunda habitación de invitados y un garaje para tres coches para acomodar el clásico Impala convertible de 1965 de Cassar. Decidieron entonces comenzar de nuevo en solar en el vecindario de Andreas Hills, rodeado de vistas a la montaña y varias rutas de senderismo que podrían servir como una opción para los entrenamientos diarios de Walters.
Cardella presentó a la pareja al arquitecto Sean Lockyer, fundador de Studio AR&D , una firma de arquitectura residencial con oficinas en Los Ángeles y Palm Springs. Cardella quería trabajar con Lockyer desde que pasó por una casa diseñada por la firma para una pareja de Los Ángeles y quedó maravillado por su atención al detalle. Walters, que anteriormente había construido una casa en Terrebonne, Oregón, y Cassar, que había sido un reformador profesional de casas, pusieron muchas de sus propias ideas sobre la mesa. "Queríamos que fuera contemporáneo", dice Walters.
Lockyer diseñó una estructura en forma de L alrededor de un patio, con una fachada de volúmenes sutilmente cónicos y una línea de techo increíblemente delgada. Bajó las alturas del techo lo cual hizo que los interiores fueran más íntimos. Sombreó la exposición orientada al oeste con un voladizo profundo, extendiendo el techo para crear una cabaña cubierta. También revistió la piscina con granito negro para que funcione como un espejo, reflejando el paisaje a su alrededor.
Al principio, Walters le dijo explícitamente al equipo de diseño que no quería cemento al desnudo ni pavimentos de terrazo, por temor a que se vieran demasiado fríos. Sin embargo, Cardella fue paciente y persistente; por una larga experiencia, sabía que la reacción negativa inicial de su cliente podía cambiar. Y poco a poco así fue. Walters dejó la carrera de medicina para convertirse en maestro; una herencia familiar le permitió jubilarse temprano y explorar su amor por la escalada y otros deportes de aventura, así como su pasión por el arte y el diseño. Mientras trabajaba con el equipo de interioristas comenzó a vislumbrar cómo los tonos fríos del cemento visto y el terrazo equilibrarían la calidez de la madera.
Lamentablemente, Cassar falleció a principios de 2020, un año antes de que se completara la casa. Las grandes reuniones que la pareja anticipaba tener aún no se han llevado a cabo debido a la pandemia. Pero Walters actualmente está trabajando para dos organizaciones locales sin fines de lucro, DAP (Desert AIDS Project) Health y AAP (AIDS Assistance Program)– Food Samaritans . "Estoy en la etapa de duelo agudo en la que luché por dar sentido a la pérdida y ahora me estoy reinventando como una persona recién soltera", dice. “Es difícil, pero tengo una nueva vida que incluye viejos y nuevos amigos".
Vía: ELLE Decor US